Las autoridades del Condado Collier están advirtiendo a los adultos mayores de una nueva modalidad de estafas.
Los malhechores aprovechan estos tiempos de pandemia, la incertidumbre y la vulnerabilidad de residentes de ciudades como Marco Island y Golden Gate, para vender estuches con supuestas pruebas del COVID 19.
Así confirmó María Pizarro, portavoz de la policía del Condado Collier.
“Hay personas que están yendo casa a casa, vendiendo pruebas del coronavirus. Queremos dejar saber que nadie del Departamento de Salud está yendo casa a casa a vender estas pruebas.”
Funcionarios de Salud del Estado de la Florida aseguran que las únicas pruebas que son proporcionadas por los distintos condados son realizadas exclusivamente en los sitios habilitados para tal fin y que nunca han aprobado venderlas.
Muchos de los residentes de Marco Island han reaccionado sorprendidos con esta nueva modalidad de estafa.
“¿Pero quién va a estar dispuesto a pagar una prueba cuando todo el mundo sabe que es gratis? Eso se lo hacen a los viejitos que tienen miedo a salir y ven esto como una opción”, dijo Jerónimo Sierra, vecino del Golden Gate.
Precisamente eso es lo que las autoridades advierten. Las víctimas en este tipo de estafas suelen ser adultos mayores. Personas que están confinadas por el virus y a los que los timadores podrían tener vigilados por un par de días.
No solo preocupa que los estafadores logren reunir algún tipo de dinero con esto, sino que puedan tener acceso a las viviendas y una vez ahí la situación puede ser más peligrosa.
“Si tienen a alguien que es mayor y que vive solito en la casa o nada más algún familiar, avísenle de lo que está pasando, es importante que ellos estén al tanto”, dijo Pizarro, y concluyó recomendando que si a usted o a un conocido alguien intenta venderle una prueba de Coronavirus en nombre de las autoridades sanitarias del Condado Collier se comunique inmediatamente con la policía.
Hasta ahora, el Departamento de Salud no ha dado detalles de la cantidad de dinero que exigen los estafadores por las pruebas.
Esta no es una práctica exclusiva de la Florida. El pasado marzo la oficina del Fiscal General de Carolina del Norte recibió informes de una práctica similar, donde estafadores vendían los “KITS” de pruebas del coronavirus y artículos de limpieza.
Y en el mes de abril el FBI anunciaba que estaba investigando sitios falsos de pruebas del virus en ciudades como Louisville, Kentucky, y Birmingham, Alabama.
